Por F. Xavier Agulló. Ser una organización o empresa socialmente responsable no debería ser cosa difícil, simplemente es necesaria coherencia, pero a menudo las organizaciones hacen que lo sea. En general, siempre he sido de la opinión que las PYME's son en general socialmente más responsables (¡o más explícitamente irresponsables cuando corresponde!) que las grandes empresas, simplemente porque en las pequeñas y medianas dicha coherencia depende más de una persona o un grupo reducido: si quien dirige la empresa es coherente, la empresa lo es (también es incoherente, claro está, si lo es la dirección).
Así pues en la gran empresa es necesaria una auténtica gestión formal que garantice dicha responsabilidad social. Es por ello que me llama la atención premios como los recibidos por Unión Fenosa o Adif en el Mercado Europeo de la Responsabilidad Social (European MarketPlace on CSR), de CSR Europe.
La solución que presentó Unión Fenosa, uno de los 5 premios del Jurado, bajo el epígrafe “El Mercado Orgánico Campesino” consiste en un plan de desarrollo rural en torno a las centrales de generación del valle del Cauca en Colombia. La eléctrica consiguió no sólo superar la originaria oposición de los habitantes de esta comunidad a la instalación de centrales energéticas sino que un buen número de familias hayan incrementado su calidad de vida gracias al mercado de productos orgánicos que han establecido con la ayuda de Fenosa.
Por su parte, Adif (ente gestor de las infraestructuras ferroviarias españolas) no consiguió premio, pero fue una de las 5 participantes de España en dicho evento. Adif presentó su modelo de “Integración de la RSE en la estrategia de negocio”.
En este mismo evento, Caja Navarra se alzó con el segundo premio del público, con su "Cuenta Cívica".
Las buenas prácticas de Unión Fenosa o Adif, que merecen su presencia en dichos premios, choca de frente con las malas prácticas que todo el mundo ya conoce sobre ambas.
Si bien es probable (no lo sé) que en Colombia Unión Fenosa tenga una buena reputación a partir de su RSC, no creo que sea así (sí lo sé) en Nicaragua, donde es conocida con el 'cariñoso' apelativo de Unión 'Penosa'. Por su parte, Adif es corresponsable (junto a Renfe y el Gobierno español) del caos que viven las Cercanías ferroviarias en Barcelona, por dejadez inversora durante años y mala planificación de las obras de tren de alta velocidad.
En ambos casos se produce una elocuente 'incoherencia' por la falta de prestación de los objetivos básicos para los que dichas empresas fueron creadas... ¿Qué piensa? ¿Podemos denominarlas pues como empresas socialmente responsables sin esta coherencia? ¿Es responsable esta responsabilidad social?
Así pues en la gran empresa es necesaria una auténtica gestión formal que garantice dicha responsabilidad social. Es por ello que me llama la atención premios como los recibidos por Unión Fenosa o Adif en el Mercado Europeo de la Responsabilidad Social (European MarketPlace on CSR), de CSR Europe.
La solución que presentó Unión Fenosa, uno de los 5 premios del Jurado, bajo el epígrafe “El Mercado Orgánico Campesino” consiste en un plan de desarrollo rural en torno a las centrales de generación del valle del Cauca en Colombia. La eléctrica consiguió no sólo superar la originaria oposición de los habitantes de esta comunidad a la instalación de centrales energéticas sino que un buen número de familias hayan incrementado su calidad de vida gracias al mercado de productos orgánicos que han establecido con la ayuda de Fenosa.
Por su parte, Adif (ente gestor de las infraestructuras ferroviarias españolas) no consiguió premio, pero fue una de las 5 participantes de España en dicho evento. Adif presentó su modelo de “Integración de la RSE en la estrategia de negocio”.
En este mismo evento, Caja Navarra se alzó con el segundo premio del público, con su "Cuenta Cívica".
Las buenas prácticas de Unión Fenosa o Adif, que merecen su presencia en dichos premios, choca de frente con las malas prácticas que todo el mundo ya conoce sobre ambas.
Si bien es probable (no lo sé) que en Colombia Unión Fenosa tenga una buena reputación a partir de su RSC, no creo que sea así (sí lo sé) en Nicaragua, donde es conocida con el 'cariñoso' apelativo de Unión 'Penosa'. Por su parte, Adif es corresponsable (junto a Renfe y el Gobierno español) del caos que viven las Cercanías ferroviarias en Barcelona, por dejadez inversora durante años y mala planificación de las obras de tren de alta velocidad.
En ambos casos se produce una elocuente 'incoherencia' por la falta de prestación de los objetivos básicos para los que dichas empresas fueron creadas... ¿Qué piensa? ¿Podemos denominarlas pues como empresas socialmente responsables sin esta coherencia? ¿Es responsable esta responsabilidad social?
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