Por Emilio J. Blanco Lobejón. Hace unos días la empresa PORCELANOSA implementaba una acción de marketing que ha sido noticia en los principales medios de comunicación.
Esta empresa ha fletado el Queen Mary 2, el barco más lujoso del mundo con más de 1700 tripulantes para agasajar a 2.500 personas invitadas, de cuarenta países, entre las que se encontraban gente procedente de empresas clientas y proveedoras, accionariado, amistades, periodistas, clase política, gente famosa y famosilla, es decir lo que en terminología de RSC llamamos sus stakeholders.
El viaje consistía en una semana de Londres a Nueva York y después tres días en los hoteles más lujosos de esta última ciudad.
Están claros los objetivos que perseguía, me los puedo imaginar:
Premiar a su clientela, empresas proveedoras y accionariado, para que sigan siéndolo.
Mantener o mejorar su imagen de marca, crear una corriente favorable de opinión sobre su solvencia y fiabilidad como empresa, etc; en fin, los objetivos típicos de una acción de estas características.
Todo eso es perfectamente lícito, pero es una acción de marketing no responsable.
Porcelanosa es una empresa multinacional, es una empresa que interactúa en todo el mundo, no puede dejar de lado a los problemas que afectan a su entorno, no lo puede hacer aunque solo sea por no cometer graves errores en su gestión.
En su página Web habla de que tienen un compromiso con el desarrollo sostenible.
Gastarse varios miles de millones de las antiguas pesetas en este tipo de acciones no es de empresas responsables, se puede poner en marcha una estrategia para conseguir los mismos objetivos y a la vez solucionar o ayudar a solucionar problemas sociales de su entorno. ( En algunos de los países que pertenecen a su mercado muchas viviendas todavía mantienen el suelo de tierra batida, por poner un ejemplo).
Los personajes que dicen que estuvieron en este crucero, la verdad es que muchos de ellos no me sorprende que fueran encantados e incluso alguno realizó alguna subasta con fines benéficos, supongo que para tranquilizar sus conciencias, pero el que asistiera gente prominente de la clase política, que solo por el hecho de dedicarse a la política deberían ser socialmente más sensibles ( olé mi ingenuidad ), me da igual de la opción política que sean, me parece una irresponsabilidad.
Pero no quiero entrar en esos temas, allá cada uno con su comportamiento, lo fundamental es que una gran empresa como Porcelanosa no contemple los principios de una gestión ética y responsable. ¿ Qué cree que va a pensar mucha de su clientela, ya sea actual o potencial, claro está la que no fue al viaje, sobre esta manera de actuar ? Yo, por ejemplo, intentaré no comprar productos de esa marca.
Esta empresa ha fletado el Queen Mary 2, el barco más lujoso del mundo con más de 1700 tripulantes para agasajar a 2.500 personas invitadas, de cuarenta países, entre las que se encontraban gente procedente de empresas clientas y proveedoras, accionariado, amistades, periodistas, clase política, gente famosa y famosilla, es decir lo que en terminología de RSC llamamos sus stakeholders.
El viaje consistía en una semana de Londres a Nueva York y después tres días en los hoteles más lujosos de esta última ciudad.
Están claros los objetivos que perseguía, me los puedo imaginar:
Premiar a su clientela, empresas proveedoras y accionariado, para que sigan siéndolo.
Mantener o mejorar su imagen de marca, crear una corriente favorable de opinión sobre su solvencia y fiabilidad como empresa, etc; en fin, los objetivos típicos de una acción de estas características.
Todo eso es perfectamente lícito, pero es una acción de marketing no responsable.
Porcelanosa es una empresa multinacional, es una empresa que interactúa en todo el mundo, no puede dejar de lado a los problemas que afectan a su entorno, no lo puede hacer aunque solo sea por no cometer graves errores en su gestión.
En su página Web habla de que tienen un compromiso con el desarrollo sostenible.
Gastarse varios miles de millones de las antiguas pesetas en este tipo de acciones no es de empresas responsables, se puede poner en marcha una estrategia para conseguir los mismos objetivos y a la vez solucionar o ayudar a solucionar problemas sociales de su entorno. ( En algunos de los países que pertenecen a su mercado muchas viviendas todavía mantienen el suelo de tierra batida, por poner un ejemplo).
Los personajes que dicen que estuvieron en este crucero, la verdad es que muchos de ellos no me sorprende que fueran encantados e incluso alguno realizó alguna subasta con fines benéficos, supongo que para tranquilizar sus conciencias, pero el que asistiera gente prominente de la clase política, que solo por el hecho de dedicarse a la política deberían ser socialmente más sensibles ( olé mi ingenuidad ), me da igual de la opción política que sean, me parece una irresponsabilidad.
Pero no quiero entrar en esos temas, allá cada uno con su comportamiento, lo fundamental es que una gran empresa como Porcelanosa no contemple los principios de una gestión ética y responsable. ¿ Qué cree que va a pensar mucha de su clientela, ya sea actual o potencial, claro está la que no fue al viaje, sobre esta manera de actuar ? Yo, por ejemplo, intentaré no comprar productos de esa marca.
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